ELas corbatas se han convertido con el paso de los años en uno de los accesorios imprescindibles a la hora de estar completamente presentable para un ambiente laboral exigente, una reunión de negocios, o simplemente un evento social importante, prenda que para el hombre, representa un completo formalismo de presentación, y una resaltante manera de imponer su presencia.
Pero esta icónica costumbre ha sufrido considerables ataques de parte de algunos neurólogos e investigadores médicos, los cuales han señalado algunas complicaciones de salud que podrían estar sufriendo las personas que frecuentemente utilizan esta prenda de vestir, lo que ha causado cierta alarma y curiosidad en los amantes de las corbatas por determinar la total veracidad de estos estudios.
El principal trabajo que habla sobre posibles consecuencias en el uso de corbatas fue presentado hace algunos años por médicos alemanes del Hospital Universitario Schleswig-Holstein ubicado en Lubeck, Alemania, donde los galenos resaltan algunos problemas encontrados en un grupo de hombres utilizados para tal estudio, los cuales fueron instruidos al uso de traje y corbata con nudo firme por largas horas y prolongadas jornadas, encontrándose en ellos luego de meticulosos análisis y resonancias magnéticas, una significativa reducción de más del 8% del flujo sanguíneo y del oxígeno que debe ser enviado normalmente por nuestro organismo hacia el cerebro, situación que no se presentó en ningún porcentaje en los individuos que no utilizaron corbata durante el estudio, quedando claramente en evidencia según los médicos, el alto grado de riesgo que su frecuente uso genera para las personas.
Simplemente un mito, solo debemos aprender a usarla
Ante esta drástica situación, numerosos fabricantes y diseñadores textiles, especialistas, y personas de reconocida trayectoria política y social que durante décadas han utilizado corbata han salido al paso en defensa de este importante accesorio de vestir, coincidiendo la mayoría de ellos, que solamente un mal uso de la corbata podría generar algún tipo de problemas de circulación en el hombre, ya que de utilizar inadecuadamente nudos tipo Windsor que normalmente son los más altos y apretados, podría producirse un aplastamiento de las arterias del cuello y vías principales de nuestro sistema respiratorio, problema que es evitado simplemente con flexibilizar o aflojar la rigidez del nudo, así como una correcta holgura en la colocación alrededor del cuello, asegurando que dichos estudios son simplemente un mito o una teoría científica mal estructurada.